Vistas al río Ness, Estacionamiento gratuito, Opciones de cenas gourmet

Las habitaciones son pequeñas y menos atractivas de lo que muestran las fotos!!! Falta de aislamiento acústico que deja que el ruido de las fiestas interrumpa el descanso!!! La calidad del mobiliario necesita una actualización!!!

La vista que enamora

La habitación era amplia y tenía una vista espectacular al río Ness. Además, el personal fue amable y servicial, lo que hizo nuestra estancia más agradable.

Sin embargo, la calefacción era un poco insuficiente y hubo molestias por ruido en la noche. La gestión de ciertos problemas no fue la mejor, lo que me dejó con una sensación mixta.

La vista al río Ness es espectacular, ideal para relajarse. Sin embargo, el ruido en la habitación fue molesto durante la noche.

El sistema de llaves es poco práctico, pero la cama es espectacular y la vista es encantadora.

cama cómoda, buena vista, llaves poco prácticas.

Las vistas al río eran espectaculares y la cama increíblemente cómoda. Sin embargo, había ruido durante la noche que interrumpía el descanso. En general, una buena experiencia aunque hubo algunos inconvenientes. 😊

la cama era espectacular y el desayuno escocés muy bueno. el internet no funcionaba bien.

Me quedé en el Glenmoriston Townhouse y la ubicación es divina, muy cercana al centro de la ciudad. El personal es encantador, siempre sonriente y amable, lo que hizo nuestra estancia aún más especial. Además, el desayuno es buenísimo, ¡no se pierdan el desayuno escocés completo y el salmón!

lo recomiendo

Habitación amplia y cómoda, excelente vista al río. Restaurante con buena calidad en los platos, aunque el servicio puede ser lento en momentos de alta demanda. Personal amigable y buena ubicación, ideal para explorar la ciudad.

Habitación enorme y cómoda, ideal para no levantarte de la cama. ¡Vistas al río y parking, qué lujo!

Pero, cariño, me quedé esperando que alguien me llevara las maletas, ¡no soy una atleta!

recomendaría este lugar para un breve paréntesis

Habitación cómoda, ubicación excelente, con parking gratuito y un ambiente acogedor que invita a relajarse después de un día explorando la ciudad.

No tengo ninguna queja

La habitación era amplia y cómoda, con una vista encantadora al río Ness. La cama era espectacular, lo que me hizo querer quedarme durmiendo todo el día. El restaurante ofrecía una buena variedad de opciones para cenar, aunque no lo probé tanto, la experiencia general fue agradable.

El ruido en la habitación fue bastante molesto, ya que hubo ruidos de risas y conversaciones que no me dejaron dormir. Además, la calefacción de la habitación era un poco débil, aunque finalmente me trajeron una estufa eléctrica.

Este lugar me queda perfecto y tiene todo lo que necesito, wi-fi, bar, y restaurante. En mi primera estancia, el personal me ayudó a encontrar un pendiente perdido, ¡un recuerdo inolvidable! Recomiendo probar el desayuno escocés.